Durante los últimos años hemos sufrido un cambio radical en la forma de hacer negocios, las tecnologías nuevas nos han obligado a transformar nuestra expectativas de una marca así como nuestra manera de consumir nuevos y diversos servicios, vivimos en una era en la que la empresa de taxis más grande del mundo no es dueña de ningún vehículo (UBER), donde la empresa de hospedaje más importante no es dueña de ningún bien raíz (AIRBNB) donde la empresa detallista más grande no es dueña de ningún inventario (ALIBABA), todas estas transformaciones nos indican de debemos de evolucionar en nuestra forma de impactar a nuestros clientes, y mejor aún, nos obliga a cambiar la forma en la que escuchamos sus necesidades.
Una parte fundamental para la creación de un nuevo negocio es buscar alguna necesidad que aún no esté siendo satisfecha, pero ¿Cómo escuchamos a nuestros clientes en un mercado que paso de lo local a lo globalizado?¿Cómo abrimos un nuevo mercado donde ni siquiera sabemos que puede haber uno?
Escuchando lo inescuchable.
Infortunadamente es difícil concebir la idea de que existen oportunidades que nadie más ha visto, aun mas difícil es concebir un negocio fuera de lo tradicional, el secreto es escuchar esas necesidades existen pero no se saben expresar, recordemos, si Henry Ford hubiera escuchado literalmente a los habitantes de su época hubiera hecho una carreta con muchos caballos y quizá con ruedas mas cómodas, pero jamás hubiera pensado en la creación de un vehículo. Entonces esto nos deja ver que lo que escuchó Ford fue una necesidad inescuchable, su época quería una manera de trasporte más rápida, más segura y menos costosa, teniendo eso en mente Ford pudo crear un prototipo de algo que pudiera tapar esa oportunidad.
En un diplomado en el Tec de Monterrey el exponente me decía ¿Cómo sabes si tu solución es la que tus clientes quieren? Pregúntales, es la única forma de saber, pero pregúntales directamente
¿Qué haces cuando un mosquito te pica? ¿Vas rápidamente a comprar algo a la farmacia?
¿Qué harías si un tiburón te muerde una pierna? ¿No le dirías a tu doctor “cóbreme lo que sea, haga lo que tenga que hacer pero sálveme la pierna?
Entonces sal y busca esas mordidas de tiburón.
El hito en la decisión de una nueva idea es identificar el problema, identificar de manera global cual es esa carreta más rápida que todo mundo quiere pero que no sabe definir, el avance tecnológico nos permite tener un contexto globalizado, y actualmente contamos con muchas herramientas que nos permiten “experimentar” en tiempo real con un enorme focus group al que llamamos “internet”.
La oportunidad esta allá afuera, los problemas están esperando a que los encontremos, experimentemos de manera cuidadosa con lo que nuestros potenciales clientes quieren.
